Una metodología diseñada para que los jóvenes descubran sus cualidades naturales, inviertan en ellas y puedan dedicarse a aquellas actividades que les harán disfrutar y desarrollarse plenamente
Entendemos que el sistema educativo trata a todos por igual, evaluando a las personas en función de su ajuste a ese modelo y haciendo muy poco por averiguar lo singular de cada una y ayudar a potenciarlo.
En la Escuela primero, y en las organizaciones después, el foco se centra en los fallos, en lo conveniente de trabajar nuestros puntos débiles, dejando a un lado aquello que hacemos bien o muy bien, pues como ya lo tenemos, no merece la pena potenciarlo.
Creemos con Gardner, que la contribución más evidente que el sistema educativo puede hacer al desarrollo del niño, consiste en ayudarle a encontrar una parcela en la que sus facultades personales puedan aprovecharse plenamente y en la que se sienta satisfecho, y preparado.
CTT surge para crear espacios y facilitar recursos, donde los jóvenes crezcan tomando confianza en sí mismos, disfrutando con el aprendizaje y experimentando con su transformación.
No aspiramos únicamente a que encuentren su talento y lo desarrollen, también aspiramos a contribuir a que estas personas, crezcan con un espíritu crítico, con ideas propias, que se pregunten por todo lo que le rodea, y se movilicen por su felicidad personal y por el bien común de la sociedad.
Conseguir que se entusiasmen por algo, y no se obsesionen por ganarse la vida, que sería la forma más radical de perderla.
Nuestro propósito no es dejar una sociedad mejor a nuestros hijos y alumnos, sino acompañarlos para que puedan crear una sociedad diferente, con el ser humano como protagonista, la Naturaleza como la Madre de la que aprender, y el Bien Común como objetivo permanente. Personas buenas, independientes, con espíritu crítico y colaborativo y con consciencia plena de su paso por la VIDA.
Hola Marcela. Disculpa a tardanza en contestarte. No trabajamos con edades tan tempranas. Nuestros talleres van dirigidos a jóvenes entre 12-17 años, con la flexibilidad propia de la madurez que a menudo no va en consonancia con la edad biológica.
Muchas gracias por interesarte por nuestro trabajo